JÓVENES SIN OPORTUNIDADES

 El riesgo de pobreza se ha incrementado para el conjunto de la población, pero de forma más acentuada entre la población joven.
 Casi uno de cada tres jóvenes de entre 16 y 29 años se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social, según el informe La maldición de la eterna joventud del Consejo de la Juventud de España (CJE) y Oxfam Intermón (2022).
A través de la campaña de la Universidad Politècnica de la Calle (UPC) hace años que denunciamos la precaria situación que viven muchos jóvenes en nuestra ciudad.
Concretamente en Barcelona un 28,6% de la población joven se encuentra en riesgo de pobreza. Datos alarmantes.  

 En el ámbito laboral…
 

El último informe de indicadoras de progreso y bienestar de la cámara del comercio (2022) alerta que la precariedad laboral de las personas jóvenes está en aumento.
Actualmente la tasa de paro de los jóvenes entre 16 y 24 años es del 29,26% en Cataluña, mientras que en la Unión Europea se sitúa en un 15% (INDESCAT).
La elevada tasa de paro viene asociada directamente al alto grado de abandono escolar que tenemos en Cataluña, que también es el más alto de Europa.

La educación es una palanca clave para acceder a la ocupación. De hecho, 4/10 jóvenes que solo tienen la educación obligatoria están desocupados, mientras que entre los que logran un nivel de estudios superior el porcentaje baja al 20%.
 
El SLJove (Sistema de indicadoras sobre la Juventud catalana) concluye que la situación de los que tienen trabajo tampoco es muy optimista. Casi la mitad de los jóvenes (49%) tienen contratos temporales, parciales y con salarios bajos, echo que provoca que el riesgo de pobreza entre la población ocupada menor de 30 años sea del 17’9% según la Encuesta de Condiciones de Vida publicada en 2023. Las más afectadas, una vez más, las mujeres y el colectivo migrante.  

En el ámbito de la educación…

La pandemia ha disparado la proporción de jóvenes que ni estudian ni trabajan en Cataluña.
Los datos de abandono escolar prematuro en Cataluña, que incluye aquellas personas de 18 a 24 años que se han quedado con el título de la ESO o ni siquiera lo han conseguido, continúan siendo una de las más altas de Europa. Se sitúa en el 16’9% por encima de la media del estado ( 13,9%) y de la Unión Europea (9,7%) en el 2022 segundos indica el último informe elaborado a partir de los datos del Sistema de indicadores del Observatorio Catalán de la Juventud.

Quién se queda en el camino por motivos, personales, familiares, laborales y/o por supervivencia, son sobre todo jóvenes, de origen migrado solos o que se encuentran en situación de vulnerabilidad social y/o económica, procedentes de familias sin estudios profesionalizadores y que viven en hogares con ingresos insuficientes para cubrir necesidades básicas.

Las consecuencias del abandono escolar prematuro son evidentes: los jóvenes que lo hacen se exponen a situaciones de paro o trabajos precarios. Gran parte de los jóvenes que abandonan la escolarización prematuramente, se encuentran en la Universidad Politècnica de la Calle. Sin futuro. Sin oportunidades, con 1.000 puertas cerradas. 
 

 En el ámbito emocional…

Muchos jóvenes necesitan no solo acompañamiento académico y refuerzo escolar personalizado, sino también apoyo emocional para poder promocionar de curso. La gente joven que no pasa por un buen momento a causa de falta de autoestima, problemas en casa o de integración en la escuela, necesita recurrir a servicios y recursos para mejorar su malestar emocional, pero no se lo pueden permitir.

La encuesta sobre juventud en Barcelona, indica que el 39,1% de los jóvenes menores de 34 años se encuentra en riesgo de sufrir problemas de salud emocional.

Estudios europeos indican que más del 20% de los jóvenes menores de 25 años se han autolesionado en alguna ocasión, la práctica se vincula al intento de olvidar algún malestar emocional, y casi el 9% de los alumnos de institutos catalanes han considerado la idea de suicidarse.

Además, el colegio de médicos de Barcelona ha alertado que los ingresos hospitalarios de jóvenes causados por problemas de salud mental han aumentado un 40% después de la pandemia, y han sido asociados principalmente a cuadros ansiodepressius y TCA. 
 

 En el ámbito de la emancipación y la vivienda…

Como ya hemos dicho, hace años que los jóvenes se están moviendo en un contexto de precariedad en el ámbito laboral, pero también en el acceso a la vivienda. Solo un 15,9% de los jóvenes menores de 30 años se pueden emancipar.
Además, tener trabajo no es suficiente para conseguir emanciparse. La precariedad, sumada a la inflación y al aumento constante del precio de la vivienda, dificulta y mucho la emancipación juvenil.
Los datos son preocupantes, 1 de cada 3 hogares formados por menores de 29 años se encuentran en riesgo de pobreza, y el incremento del coste de vida, y la congelación de los sueldos no ha hecho más que empeorar la situación socioeconómica de un gran número de jóvenes.
 

Lo que hacemos para ayudar a la gente joven
 

La descripción del colectivo de jóvenes en paro, sin estudios y en gran parte de origen extranjero, se corresponde con el colectivo que acompañamos, orientamos y formamos la Fundació Comtal para que puedan reescribir su futuro.

En el ámbito el laboral

Abordamos la necesidad de acceso al mercado de trabajo de jóvenes en situación vulnerable a través del Programa Incorpora de la Fundación Bancaria “la Caixa”.
Fomentamos la mejora de la empleabilidad a través de Puntos Formativos donde se trabajan competencias transversales y digitales, así como el CV, y complementamos estas formaciones con simulaciones de entrevistas y acompañamiento y orientación profesional adaptada en las necesidades e intereses de cada participante.
Fruto del trabajo hemos conseguido que 90 jóvenes encuentren trabajo.

En el ámbito educativo
 

Para combatir el abandono escolar prematuro y sus consecuencias, ayudamos a becar a jóvenes y ofrecemos proyectos educativos de segunda oportunidad y de refuerzo escolar.  
En la Escuela de Segunda Oportunidad, ofrecemos a jóvenes en situación vulnerable una nueva ocasión de formarse y de definir su itinerario formativo y/o laboral a partir del desarrollo de sus potencialidades.
Y gracias a la Fundació Nou Cims, la Fundación Maite Iglesias Baciana, la Fundación Sandra Salgado y la Fundación Espabila con las que colaboramos, más de 200 jóvenes cuentan con becas para poder formarse.

Mientras las fundaciones mencionadas cubren los costes económicos de algunos de nuestros jóvenes, nosotros damos ayudas directas por el transporte y material escolar, acompañamos la trayectoria formativa del alumnado para que pueda lograr con éxito las competencias académicas, y les orientamos, empoderamos y motivamos en las tutorías para que puedan hacer posible sus sueños de futuro

Como resultado, hemos conseguido que:
 
– El 80% de los jóvenes de la escuela consigan trayectorias de éxito.
– El 75% continúe formándose el próximo curso.
– El 87,5% mejoren sus competencias transversales.
 

En el ámbito residencial

En el ámbito de la vivienda, acogemos a chicos y chicas extuteladas y en situación de vulnerabilidad para que tengan un lugar seguro donde vivir y poder desarrollarse.
Cubrimos las necesidades básicas de vivienda, alimentación e higiene, y los y las acompañamos en su proceso de emancipación y transición hacia la vida adulta.
Además de ofrecerles un recurso de vivienda, y de la orientación en el ámbito de la formación y la inserción laboral, trabajamos con los y las jóvenes, hábitos de vida saludables y las acompañamos en la gestión de los trámites legales, económicos, sanitarios y administrativos que necesiten abordar.
 Al finalizar el curso hemos hecho posible que:

El 87,5% de los jóvenes encuentren trabajo con un contrato estable relacionado con el sector del hotelería, la logística y la atención a las personas.
– El 100% de los jóvenes logran con éxito sus formaciones.
– El 100% continúan con sus formaciones el próximo curso. 

De manera transversal

De manera transversal, también les ofrecemos asesoramiento legal en el ámbito laboral, de extranjería y de vivienda, y apoyo psicológico, así como recursos y servicios para que puedan mejorar sus capacidades digitales.
De este modo trabajamos para mejorar el bienestar integral de la población joven y reducimos la situación de vulnerabilidad.
Son jóvenes con historias difíciles, de superaciones personales y con mucho potencial y ganas de tener un futuro mejor cómo es el caso de la Noa, l’Ayman i l’Ebrima, jóvenes que necesitan soporte para evitar que acaben en la Universidad Politécnica de la Calle. Sin futuro. Sin oportunidades, con 1.000 puertas cerradas.

Reducir el abandono escolar prematuro es vital para el futuro de la sociedad y también para reducir el riesgo de pobreza, que conduce a la exclusión social, al paro, y a ocupaciones más precarias.
Las becas constituyen una ayuda imprescindible para que muchos alumnos puedan retomar su itinerario formativo, ante la precariedad de su situación socioeconómica.
Gracias a la colaboración de personas y organizaciones como la Fundació Nou Cims o la Fundación Maite Iglesias Baciana, cada año podemos becar a jóvenes. Pero seguimos sin cubrir las necesidades del alumnado. ¿Nos ayudas?

¿Qué puedes hacer tú?

 Colaborando con la campaña de la Universidad Politécnica de la Calle podremos becar y acompañar a los jóvenes que atendemos para que puedan hacer realidad sus sueños de futuro.
 Actúa para mejorar la situación de los jóvenes que atendemos:

Haz un donativo.
Haz voluntariado